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Durante cuarenta años, Berlín fue el símbolo de la Guerra Fría, cuando el centro de la ciudad fue dividido en dos por el odioso Muro. Al oeste del Muro, la ciudad desarrolló una "muestra del occidente capitalista", mientras que al este del Muro se construían bloques de viviendas comunistas de color gris. En medio, había una zona desolada que no pertenecía a nadie. Tras la caída del muro, esto cambió drásticamente. Berlín se convirtió en la capital de Alemania de nuevo y trabajó duro para empezar desde cero. Y lo logró: la ciudad respira vida como nunca antes y atrae a la gente de forma mágica. Tiene lugares de interés histórico, famosos museos, infinitas tiendas y varios barrios con restaurantes excelentes, acogedores bares y discotecas modernas. Berlín es un destino genial para un viaje a la ciudad.
El corazón de la nueva ciudad está formado por la Potsdammer Platz. La plaza en sí es un cruce de tráfico muy concurrido, pero alrededor de la plaza ha surgido un nuevo barrio muy dinámico con teatros, restaurantes, bares, casinos y cines. En esta zona se dio rienda suelta a los arquitectos, y una de las principales atracciones es el Sony Center que alberga, por ejemplo, el Museo del Cine de Berlín, que contiene gran parte de la colección privada de Marlene Dietrich. Desde el mirador del último piso de la Torre Kohllhoff podrá observar claramente cómo está diseñado el nuevo centro de la ciudad.
Desde la cúpula de cristal del Edificio Reichstag también tendrá una buena vista. Es una de las atracciones más populares, así que tendrá que anticipar una larga espera, sobre todo en los meses de verano. El mirador más alto de Berlín está al este de la ciudad: el Fernsehturm, de 389 metros de alto, cerca de Alexanderplatz. El mirador se encuentra a una altitud de más de 200 metros./p>
A pesar de su tragedia, Berlín no ha olvidado la división de la ciudad. Por ejemplo, podrá ver una línea de ladrillos que marcan la ubicación del Muro de Berlín. En el Mühlenstrasse aún se conserva parte del Muro, pero ya no es el muro de cemento gris que solía ser. Artistas de todo el mundo han decorado la pared con sus obras y en la actualidad es una galería al aire libre, la Galería del Lado Este. En la Bernauer Strasse queda otra parte del Muro, incluida una parte de tierra de nadie para no olvidar cómo solía ser. El Dokumentations Zentrum cuenta la historia del Muro a través de cientos de fotos, documentos y vídeos. El Museum Haus am Checkpoint Charlie se centra principalmente en los intentos de escapada de los alemanes del este.
Berlín tampoco puede ignorar su otra tragedia, la Segunda Guerra Mundial. El Memorial al Holocausto fue colocado para recordar a las víctimas judías de los nazis. Se trata de un monumento controvertido formado por más de 2700 bloques de cemento de diferentes alturas con estrechos caminos entre ellos. El diseñador quería que el diseño provocara desorientación y aislamiento. Bajo el monumento hay un centro de documentación.
El Museuminsel es literalmente una isla en el centro de Berlín, que alberga algunos de los museos más grandes de la ciudad, como por ejemplo el Museo Egipcio, que tiene una maravillosa colección de antiguo arte egipcio, el Museo Pergamon, con antiguos objetos de las épocas griegas e islámicas, y la Antigua Galería Nacionalque contiene esculturas y cuadros del siglo XIX.
Aunque se conservan muy pocos edificios medievales en Berlín, todavía puede ver algunos en la ciudad de Bernau, a veinte kilómetros al noreste de Berlín. La ciudad tiene preciosas murallas antiguas y una impresionante iglesia de estilo gótico. El Museo de Historia se encuentra cerca de la puerta principal de la ciudad..
El antiguo campo de concentración de Sachsenhausen está a aproximadamente cincuenta kilómetros al norte de Berlín. Este campo se ha conservado en su estado original y en el museo KZ Sachsenhausen podrá descubrir los métodos de tortura que utilizaban los nazis. Si necesita relajarse después de visitar un museo tan horrible, le recomendamos que vaya a la zona del Castillo de Oranienburg. El edificio, de estilo barroco, está rodeado de un precioso parque que incluye un jardín botánico.
En Potsdam, a 26 kilómetros al suroeste de Berlín, se encuentra el precioso Palacio Sanssouci. El interior del palacio, de estilo rococó, es impresionante, y está rodeado de unos enormes jardines con fuentes y esculturas de mármol. En el siglo XVIII, Potsdam también fue el hogar de muchos artesanos holandeses. Vivían en su propio barrio, en casas típicas holandesas.
Desde Berlín podrá acceder fácilmente en coche de alquiler a la costa del Báltico. Usedom, por ejemplo, tiene una preciosa playa alargada. Muchas playas de la costa del Báltico tienen una zona reservada para el nudismo.
Berlín ofrece un gran número de hoteles de distintas categorías. Puesto que el transporte público en Berlín es excelente, no importa mucho en qué barrio se aloje. Si prefiere mantenerse cerca de las principales atracciones, le recomendamos que alquile un hotel en "Mitte">
Al contrario de lo que ocurre en otras grandes ciudades europeas, no es difícil encontrar un espacio donde aparcar en Berlín. Hay suficiente espacio en la calle, pero también hay cientos de garajes de estacionamiento. Fuera del centro de la ciudad hay muchas calles donde incluso podrá aparcar gratis. Gracias al excelente sistema de transporte público de Berlín, esto es una opción viable. Hay aparcamientos cerca de todas las estaciones U y S-bahn en los suburbios, donde podrá dejar su coche gratis o por un precio muy bajo.
El centro de la ciudad es una 'Umweltzone', donde solamente podrá conducir si tiene una pegatina especial en el parabrisas.
El Aeropuerto de BerlínAeropuerto de Berlín-Brandeburgo (anteriormente: Schönefeld) se encuentra a dieciséis kilómetros al suroeste de la ciudad. Puede acceder al aeropuerto fácilmente con su coche de alquiler. La autopista A113 (Autobahn) pasa por debajo del aeropuerto y conecta con la carretera de circunvalación A100 de Berlín, cerca de Neukölln.