Alquiler de coches Lisboa

El nombre de Lisboa hace que uno piense automáticamente en fado, ese tipo de música melancólica que representa a la perfección a la capital portuguesa y a sus habitantes. Al igual que los temas de los que trata el fado, Lisboa ha tenido sus propios contratiempos. En 1755 la ciudad fue prácticamente destruida por un terremoto seguido por un tsunami. Y en 1988 un incendio destruyó gran parte del distrito histórico de Baixa. Pero Lisboa nunca ha tirado la toalla y se levanta después de cada caída.

Después del mencionado incendio, Lisboa fue reestructurada. Se diseñó una gran zona para la Exhibición Universal de 1998. Las instalaciones de la Expo reciben el nombre de Parque das Naçōes en la actualidad, una animada zona en los alrededores de un gran centro comercial. Aquí también encontrará bares y restaurantes, además del Oceanarium, el acuario más grande de Europa..

El río Tajo es la espina dorsal de Lisboa, con su llamativo Ponte 25 de Abril. ¿Este puente colgante no le recuerda al Puente Golden Gate de San Francisco? Ambos puentes fueron construidos por la misma empresa. Su nombre hace referencia a la fecha de la Revolución de los Claveles de 1974. En el puente hay una gran estatua de Cristo en un alto pedestal. Puede subir en el ascensor y disfrutar de una magnífica vista del puente, el río Tajo y Lisboa.

La plaza más famosa de la ciudad es Rossio. Es un gran punto de encuentro y la plaza está rodeada de restaurantes y tiendas. Está conectada a la Praça do Comércio, una gran plaza adyacente al Tajo. Esta plaza y las calles de su alrededor se construyeron después del terremoto de 1755. Puede resultar un poco austero y, a veces, muy ventoso.

El tranvía 28 va desde esta gran plaza hasta el distrito de Alfama, más pintoresco. Una de las grandes ventajas del tranvía es que no tendrá que subir a pie. Muchos turistas y los propios portugueses son conscientes de esto, por lo que puede volverse una línea muy abarrotada. Alfama y Bairro Alto (que significa Barrio Alto) son preciosos barrios con calles estrechas, cafeterías y sitios para comer. Aquí también podrá escuchar fado, por ejemplo en uno de los muchos restaurantes que rodean la Praça Camões (en Bairro Alto).

La oficina de turismo cuenta con varios quioscos por toda la ciudad. Podrá encontrarlos bajo el título "Ask me Lisboa". Aquí podrán darle información sobre qué ver, además de ayudarle a encontrar alojamiento.

Lisboa y sus alrededores

En mitad del Tajo hay una torre de vigilancia, la Torre de Belém. Se construyó a principios del siglo XVI para proteger el puerte, pero se utilizó como prisión durante la ocupación española (que empezó a finales del siglo XVI). En el distrito de Belém también podrá encontrar el Monumento a los Descubrimientos (Padrão dos Descobrimentos).

The Castelo de São Jorge se encuentra en lo alto de una colina. Fue la residencia de la Casa Real portuguesa hasta que los españoles conquistaron Portugal. En 1755 sufrió grandes daños a causa del terremoto, pero sin duda vale la pena visitarlo.

También le recomendamos que visite la región de Lisboa. A los habitantes de Lisboa les gusta ir a Sintra, donde los Mores y, posteriormente, los portugueses ricos construyeron sus grandes casas de campo. De camino a la ciudad podrá ver los primeros palacios, como el palacio rosa de Queluz y el Palácio Nacional de Pena, que parece sacado de un cuento de hadas.

Tras pasar por Sintra, puede seguir conduciendo hacia el oeste. Llegará a la península de Cabo Carvoeiro, el extremo más occidental de la península europea. Obviamente esta península era un punto estratégico, y por eso se construyó aquí un fuerte en el siglo XVII.

¿Le apetece escapar de la acogedora pero bulliciosa Lisboa? Coja su coche de alquiler y bordee el Tajo. Conduzca río arriba (hacia el noreste) y pasará por bonitas ciudades y pueblos. Un consejo: podrá comer excelentes platos locales en estos pueblos por menos de la mitad de lo que pagaría en el centro de Lisboa. Cerca de la pintoresca ciudad de Abrantes se encuentran los restos de un castillo del siglo XIV, y podrá disfrutar de unas hermosas vistas de la zona.

Aparcamiento

Lisboa es una ciudad ajetreada y encontrar aparcamiento puede resultar difícil. Además, muchas de las calles son estrechas y empinadas, y están reservadas a los peatones o al tranvía. Hay algunos garajes de estacionamiento, pero suelen estar llenos. En la calle podrá aparcar en las zonas azules si paga una tarifa, pero aparcar en las zonas amarillas y rojas está prohibido.

Aeropuerto de Lisboa

El aeropuerto de Lisboa se llama Aeroporto da Portela y está a 7 kilómetros al noreste de la ciudad, junto a la A1, que conecta Lisboa y Porto. Siga la autopista A5 desde Cascais/Estoril. Tanto en la A1 como en la A5 las salidas del aeropuerto están claramente señalizadas (siga la carretera de circunvalación 2a).