Si todavía estás en la oficina de alquiler, insiste en una inspección conjunta del coche. Si hiciste fotos del coche al recogerlo, pide al empleado de la oficina de alquiler que compare con ellas el estado actual del vehículo. Si resulta que el daño ya estaba presente antes, haz que el documento de registro confirme que no se han producido nuevos daños durante el alquiler.
Si ha recibido el cargo después del alquiler cuando ya está en casa, pida a la empresa de alquiler de coches que demuestre que los daños indicados se produjeron durante su periodo de alquiler. Además, pida una factura de daños. En caso de que haya hecho fotos del coche al recogerlo y al devolverlo, téngalas preparadas para justificar su punto de vista.